Wenceslao Alpuche y Gorocica
Nació en Tihosuco el 28 de septiembre de 1804 y murió en Tekax, Yucatán, el 12 de septiembre de 1841. En 1842, sus composiciones fueron editadas por un grupo de amigos. Durante su residencia en la ciudad de México entró en contacto con otros poetas, como el cubano José María Heredia y José Joaquín Pesado. Inició su carrera literaria con una pieza teatral y posteriormente se inclinó por la poesía de autores como: Manuel José Quintana, Montiano, Luzán, Jovellanos, Moratín y Meléndez; influencias que se observan en su obra.
Escribió en los periódicos de la capital. Su obra lírica asume dos temáticas: la patriótica y la amatoria. Entre los de la primera índole están: Hidalgo, Grito de Dolores, La Independencia, Al suplicio de Morelos y Moctezuma. Entre los de la segunda se hallan: Eloísa (que dedicó al patriota y escritor Andrés Quintana Roo), La perfidia, A una mexicana, A una joven, A Clemencia y Chapultepec. Hay dos poemas que sobresalen en su exaltación de los valores yucatecos, su naturaleza y su gente: La vuelta a la patria y La fama. Entre sus primeros poemas figura una fábula de sátira política. A este respecto, el poeta Alberto Bolio Ávila asegura que Alpuche es autor de la primera fábula de la literatura yucateca. Su libro de poemas tuvo una segunda edición en 1887, en la imprenta Hidalgo de Mérida.
Fue diputado de la Legislatura local en dos ocasiones, y una como representante de Yucatán ante el Congreso de la Unión. Sus restos reposan en la Ermita de San Diego, en la ciudad de Tekax, donde el poeta se había retirado para dedicarse a la agricultura. En 1873, Francisco Sosa y Escalante dio a conocer un ensayo biográfico y crítico sobre su obra; en este estudio, el autor incluye, en el mismo volumen, una selección de sus poemas. En 1996, Rubén Reyes Ramírez rescató en un volumen su producción literaria.
Algunos de sus poemas aparecen en la edición antológica Año Nuevo, (México, 1837) auspiciado por la Academia de San Juan de Letrán, de la que formó parte junto con varios escritores de la época.
Entre los autores que se expresaron favorablemente de la obra de Alpuche se cuentan José María de Heredia, Andrés Quintana Roo y el ya mencionado Francisco Sosa.
Además de los ya mencionados, Vicente Calero Quintana, Alonso de Regil y Peón, Manuel Sánchez Mármol, Edmundo Bolio Ontiveros, Abelardo Barrera Osorio, José Esquivel Pren y Martín Ramos Díaz han dado testimonio de su vida y escrito sobre su obra.
Referencias:
Calero Quintana, Vicente. Obras reunidas. Edición e introducción de Manuel Sol. Mérida, Centro Peninsular en Humanidades y Cineicas Sociales de la UNAm, 2019, pp. 51-66.
De Regil y Peón, Alonso y Manuel Sánchez Mármol. Poetas yucatecos y tabasqueños. Colección de sus mejores producciones. Primera reimpresión. Mérida, Universidad Juárez Autónoma de Tabasco-Universidad Autónoma de Yucatán-Compañía Editorial de la Península, 2005.
Peniche Barrera, Roldán y Gaspar Gómez Chacón. Diccionario de escritores de Yucatán. Tercera edición. Mérida, Compañía Editorial de la Península, 2019, pp. 27-28.
Ramos Díaz, Martín. La diáspora de los letrados. Poetas, clérigos y educadores en la frontera caribe de México. Chetumal, Universidad de Quintana Roo. 1997.
Reyes Ramírez, Rubén (presentación, selección y notas). La voz ante el espejo. Antología general de poetas yucatecos nacidos en el siglo XIX. Tomo I. Segunda edición. Mérida, Gobierno del Estado de Yucatán, 1998, pp. 55-56.
Sosa, Francisco. Ensayo biográfico y crítico de don Wenceslao Alpuche. México, Imprenta del Comercio de Nabor Chávez, 1873.
